miércoles, 25 de noviembre de 2009

Planetas


MERCURIO: Mercurio es el planeta del Sistema Solar más próximo al Sol, y el más pequeño de los planetas. Forma parte de los denominados planetas interiores o rocosos. Mercurio no tiene satélites. Se conocía muy poco sobre su superficie hasta que fue enviada la sonda planetaria Mariner 10, y se hicieron observaciones con radares y radiotelescopios.
Antiguamente se pensaba que Mercurio siempre presentaba la misma cara al Sol, situación similar al caso de la Luna con la Tierra; o sea, su periodo de rotación era igual a su periodo de traslación (88 días). Sin embargo, en 1965 se enviaron pulsos de radar hacia Mercurio, con lo cual quedó definitivamente demostrado que su periodo de rotación era de 58,7 días, lo cual es 2/3 de su periodo de traslación. Esto no es coincidencia, y es una situación denominada resonancia de giro-orbital. Al ser un planeta cuya órbita es interior a la de la Tierra, Mercurio periódicamente pasa delante del Sol, fenómeno que se denomina tránsito.
Observaciones de la órbita de Mercurio a través de muchos años demostraron que su perihelio gira 43" de arco más por siglo de lo predicho por la mecánica clásica de Newton. Esta discrepancia llevó a un astrónomo Francés muy importante, Urbain Le Verrier a pensar que existía un planeta aún más cerca del Sol, al cual llamaron Planeta Vulcano, que perturbaba la órbita de Mercurio. Ahora se sabe que Vulcano no existe; la explicación correcta del comportamiento del perihelio de Mercurio se encuentra en la Teoría General de la Relatividad.

VENUS

Venus es el segundo planeta del Sistema Solar, a una distancia media de 108 millones de km del Sol, en una órbita casi circular e inclinada algo más de 3º respecto del plano orbital terrestre. Es el más semejante a La Tierra por su tamaño, masa, densidad y volumen. Los dos se formaron en la misma época, a partir de la misma nebulosa.
Sin embargo, es diferente de la Tierra. No tiene océanos y su densa atmósfera, compuesta en un 96% de dióxido de carbono, provoca un efecto invernadero que eleva la temperatura hasta los 480 ºC.
Su atmósfera está compuesta mayormente de dióxido de carbono (96%), nitrógeno (3% aprox.) además de oxígeno, vapor de agua, monóxido de carbono, cloruro y fluoruro de hidrógeno, entre otros elementos.
A Venus es posible observarlo como un objeto muy brillante en la mañana antes de la salida del Sol (el llamado Lucero del Alba) o al atardecer luego de la puesta del Sol (el llamado Lucero de la Tarde), esto se debe a que es un planeta que cuya órbita se encuentra ubicada entre el Sol y la Tierra. Por ello, los primeros astrónomos pensaban que Venus eran dos cuerpos diferentes.
Venus gira sobre su eje muy lentamente y en sentido contrario al de los otros planetas, como consecuencia de poseer una inclinación en su eje de 177º respecto del plano de su órbita. Por ello, en Venus el Sol sale por el oeste y se pone por el este, al revés de lo que ocurre en La Tierra. Además, el día en Venus dura más que el año: el movimiento de rotación es extremadamente lento, empleando 243 días terrestres en completar un giro sobre su propio eje mientras que para completar una órbita en torno al Sol sólo requiere unos 225 días.
La superficie de Venus es relativamente joven, entre 300 y 500 millones de años. Tiene amplísimas llanuras, atravesadas por enormes ríos de lava, y algunas montañas.
Venus tiene muchos volcanes. Más del 85% del planeta está cubierto por roca de origen volcánico. La lava ha creado surcos, algunos muy largos. Algunos de hasta 7.000 km. Debido a la intensa actividad volcánica la superficie venusina ha sido modificada y regenerada de tal forma que la mayor parte de ella tiene una antigüedad de entre 300 y 500 millones de años por lo que, en términos geológicos, es una superficie joven.
En Venus también hay cráteres de los impactos de los meteoritos. Sólo de los grandes, porque los pequeños se deshacen en la espesa atmósfera.
Los astrónomos se refieren a Venus como el planeta hermano de la Tierra. El diámetro de Venus (unos 12.104km) es ligeramente menor que el terrestre (12.756km), tienen masas semejantes, por lo que sus densidades también lo son (Tierra 5,5 g/cm³ y Venus 5,2 g/cm). Ambos se formaron más o menos al mismo tiempo y se condesaron a partir de la misma nebulosa. Sin embargo, durante los últimos años los investigadores han encontrado que el parecido termina aquí. Venus es muy diferente de la Tierra. No tiene océanos y está rodeado por una densa atmósfera compuesta principalmente por dióxido de carbono con casi nada de vapor de agua. Por su densidad, el interior de Venus debe ser muy parecido al de la Tierra.

TIERRA

La Tierra, el tercer planeta desde el Sol y quinto en cuanto a tamaño de los ocho planetas principales. La distancia media de la Tierra al Sol es de 149.503.000 km. Es el único planeta conocido que tiene vida, aunque algunos de los otros planetas tienen atmósferas y contienen agua. La Tierra no es una esfera perfecta, sino que tiene una forma especial que se denomina “geoide”, con un diámetro mayor en el Ecuador que en los Polos. La Tierra gira sobre su eje una vez cada 23 horas, 56 minutos y 4,1 segundos. Por la forma de la Tierra, un punto del ecuador gira a razón de un poco más de 1.600 km/h y un punto de la Tierra a 45° de altitud N, gira a unos 1.073 km/h.
Se puede considerar que la Tierra se divide en cinco partes: la primera, la atmósfera, es gaseosa; la segunda, la hidrosfera, es líquida; la tercera, cuarta y quinta, la litosfera, el manto y el núcleo son sólidas. La atmósfera es la cubierta gaseosa que rodea el cuerpo sólido del planeta. Aunque tiene un grosor de más de 1.100 km, aproximadamente la mitad de su masa se concentra en los 5,6 km más bajos. La litosfera, compuesta sobre todo por la fría, rígida y rocosa corteza terrestre, se extiende a profundidades de 100 km. La hidrosfera es la capa de agua que, en forma de océanos, cubre el 70,8% de la superficie de la Tierra. El manto y el núcleo son el pesado interior de la Tierra y constituyen la mayor parte de su masa.
La datación radiométrica ha permitido a los científicos calcular la edad de la Tierra en 4.650 millones de años. Aunque las piedras más antiguas de la Tierra datadas de esta forma, no tienen más de 4.000 millones de años, los meteoritos, que se corresponden geológicamente con el núcleo de la Tierra, dan fechas de unos 4.500 millones de años, y la cristalización del núcleo y de los cuerpos precursores de los meteoritos, se cree que ha ocurrido al mismo tiempo, unos 150 millones de años después de formarse la Tierra y el Sistema Solar.
El fenómeno del magnetismo terrestre es el resultado del hecho de que toda la Tierra se comporta como un enorme imán. El físico y filósofo natural inglés William Gilbert fue el primero que señaló esta similitud en 1600, aunque los efectos del magnetismo terrestre se habían utilizado mucho antes en las brújulas primitivas. Los polos magnéticos de la Tierra no coinciden con los polos geográficos de su eje. El polo norte magnético se sitúa hoy cerca de la costa oeste de la isla Bathurst en los Territorios del Noroeste en Canadá, casi a 1.290 km al noroeste de la bahía de Hudson. El polo sur magnético se sitúa hoy en el extremo del continente antártico en Tierra Adelia, a unos 1.930 km al noreste de Little America (Pequeña América).
Las posiciones de los polos magnéticos no son constantes y muestran notables cambios de año en año. Las variaciones en el campo magnético de la Tierra incluyen una variación secular, el cambio en la dirección del campo provocado por el desplazamiento de los polos. Esta es una variación periódica que se repite después de 960 años. También existe una variación anual más pequeña, al igual que se da una variación diurna, o diaria, que sólo es detectable con instrumentos especiales.
Recientes estudios de magnetismo remanente (residual) en rocas y de las anomalías magnéticas de la cuenca de los océanos han demostrado que el campo magnético de la Tierra ha invertido su polaridad por lo menos 170 veces en los pasados 100 millones de años. El conocimiento de estas modificaciones, datables a partir de los isótopos radiactivos de las rocas, ha tenido gran influencia en las teorías de la deriva continental y la extensión de las cuencas oceánicas.

MARTE

Marte es el cuarto planeta del Sistema Solar. Es el llamado "Planeta Rojo". Forma parte de los llamados planetas telúricos (de naturaleza rocosa, como la Tierra) y es el primero de los planetas exteriores a la órbita terrestre. Es, posiblemente, el más parecido a la Tierra.
Tycho Brahe midió con gran precisión el movimiento de Marte en el cielo. Los datos sobre el movimiento retrógrado aparente (lazos) permitieron a Kepler hallar la naturaleza elíptica de su órbita y determinar las leyes del movimiento planetario conocidas como leyes de Kepler.
Forma parte de los planetas superiores, o exteriores, llamados así porque nunca pasan entre el Sol y la Tierra ni jamás se les ve en creciente ni en cuarto. Sus fases están poco marcadas, hecho que es fácil de demostrar geométricamente. Considerando el triángulo Sol-Tierra-Marte, el ángulo de fase es el que forman el Sol y la Tierra vistos desde Marte. Alcanza su valor máximo en las cuadraturas cuando el triángulo STM es rectángulo en la Tierra. Para Marte, este ángulo de fase no es nunca mayor de 42º, y su aspecto de disco giboso es análogo al que presenta la Luna 3,5 días antes o después de la Luna llena. Esta fase, visible con un telescopio de aficionado, no logró ser vista por Galileo, quien sólo supuso su existencia.
Tiene una forma ligeramente elipsoidal, con un diámetro ecuatorial de 6.794 km y el polar de 6.750 km. Medidas micrométricas muy precisas han dado un achatamiento de 0,01, tres veces mayor que el de la Tierra. A causa de este achatamiento, el eje de rotación está afectado por una lenta precesión debida a la atracción del Sol sobre el abultamiento ecuatorial del planeta. La precesión lunar, que en la Tierra es dos veces mayor que la solar, no tiene su equivalente en Marte.
Con este diámetro, su volumen es de 15 centésimas el terrestre y su masa solamente de 11 centésimas. En consecuencia, la densidad es inferior a la de la Tierra: 3,94 en relación con el agua. Un cuerpo transportado a Marte pesaría 1/3 de su peso en la Tierra, debido a la poca fuerza gravitatoria.
La atmósfera de Marte es mucho más delgada que la de la Tierra y las temperaturas extremas sobre la superficie van desde 110 grados bajo cero en los polos en invierno a 0 grado en verano en la cara que da al Sol.
Marte posee dos pequeños satélites, Phobos, de unos 13 km de largo en y Deimos, de unos 7 km de largo. Ambos orbitan al planeta a gran velocidad y muy cerca de él. Phobos gira alrededor de Marte en unas 7 hs y media y Deimos tarda unas 30 horas en girar alrededor del planeta.

JUPITER

Júpiter es el quinto planeta del Sistema Solar. Forma parte de los denominados planetas exteriores o gaseosos. En la mitología griega y después en la romana fue reconocido como el señor del cielo y el más poderoso de los dioses del Olimpo: el griego Zeus y el romano Júpiter de quien tomo el nombre.
Júpiter es un cuerpo masivo gaseoso, formado principalmente por hidrógeno y helio, carente de una superficie interior definida. Entre los detalles atmosféricos se destacan la Gran mancha roja, un enorme anticiclón situado en las latitudes tropicales del hemisferio sur, la estructura de nubes en bandas y zonas, y la fuerte dinámica de vientos zonales con velocidades de hasta 140 m/s (504 km/h).
Júpiter es el más brillante y masivo de los planetas del Sistema Solar: su masa equivale a unas 2,47 veces la suma de las masas de todos los demás planetas juntos. Júpiter también posee la velocidad de rotación más rápida de los planetas del Sistema Solar: gira sobre su eje en poco menos de 10 horas. La atmósfera se encuentra dividida en regiones con fuertes vientos zonales con periodos de rotación que van desde las 9h 50m 30s en la zona ecuatorial a las 9h 55m 40s en el resto del planeta.
En el exterior del planeta el hidrógeno y el helio se comprimen progresivamente. Más abajo se espera la existencia de un núcleo rocoso formado principalmente por materiales helados y más densos.
Los principales satélites de Júpiter fueron descubiertos por Galileo Galilei el 7 de enero de 1610, razón por la que se les llama en ocasiones satélites galileanos. Reciben sus nombres de la mitología griega si bien en tiempos de Galileo se les denominaba por números romanos dependiendo de su orden de cercanía al planeta. Ellos son: Io, Europa, Ganímedes y Calisto.
El descubrimiento de los satélites constituyó un punto de inflexión en la ya larga disputa entre los que sostenían la idea de un sistema geocéntrico, es decir, con la Tierra en el centro del universo, y la copernicana (o sistema heliocéntrico, es decir, con el Sol en el centro del Universo), en la cual era mucho más fácil explicar el movimiento y la propia existencia de los satélites naturales de Júpiter. Ganímedes, con un diámetro de 5268 km, es el satélite más grande de todo el sistema solar.
Además de los mencionados satélites galileanos, las distintas sondas espaciales enviadas a Júpiter y observaciones desde la Tierra han ampliado el número total de satélites de Júpiter hasta 63.
Júpiter posee un tenue sistema de anillos que fue descubierto por la sonda Voyager 1 en marzo de 1979. El anillo principal tiene unos 6500 km de ancho, orbita el planeta a cerca de 1.000.000 km de distancia y tiene un espesor vertical inferior a la decena de kilómetros. Su espesor óptico es tan reducido que solamente ha podido ser observado por las sondas espaciales Voyager 1 y 2 y Galileo.
En julio de 1994 el cometa Shoemaker-Levy 9 impactó contra la atmósfera de Júpiter. El cometa había sido disgregado por la acción de la gravedad de Júpiter en numerosos fragmentos en un paso anterior y cercano por el planeta.

SATURNO

Saturno:Corresponde al sexto planeta del Sistema Solar. Es el segundo más grande, se encuentra a una distancia de 1.428 millones de kilómetros del sol. Su volumen es 784 veces mayor que el de la Tierra. Saturno es el "rival" del planeta Júpiter, porque tiene una estructura más compleja de anillos y con un mayor número de satélites. Esta rodeado por 4 anillos formados por meteoritos y partículas de hielo muy pequeñas. Alrededor de él giran 16 satélites, de los cuales el mayor es el Titán, mucho más grande que la Luna de la Tierra.

URANO

Urano:Es el séptimo planeta del Sistema Solar. Urano es el tercero en tamaño, está formado por varios gases, y entre los más importantes están el hidrógeno, el helio y el metano. El cielo de Urano es de color verdoso. Se encuentra a una distancia de 2.871 millones de kilómetros del Sol. Presenta anillos menores que los de Saturno. Alrededor de Urano giran cinco satélites.

NEPTUNO

Neptuno:Es un planeta que está muy alejado del sol. Neptuno es el octavo planeta del Sistema Solar y se encuentra específicamente a 4.498 millones de kilómetros del sol. A su alrededor giran dos satélites. Posee una atmósfera gaseosa similar a la de Urano aunque más densa.

PLUTON

Es el último planeta del Sistema Solar y, por ende, el que está más alejado del Sol; la distancia entre Plutón y el Sol es de 5.904 millones de kilómetros. Por esta razón entonces es un planeta muy frío.

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